El Evangelio de Cristo
Otro día más, mirando al suelo
Fingiendo estar bien, pero gritando por dentro
Rostros pasan, nadie pregunta cómo estás
Te escondes detrás de tu verdad callada
📖 “Miré a mi derecha, y observé; pero no había quien me conociera; no tuve refugio, nadie cuidaba de mi vida.” (Salmo 142:4)
La rutina pesa, el alma se cansa
Te preguntas si tu vida tiene esperanza
Pero en medio del ruido, una voz susurra fe:
“Hijo mío, Yo estoy aquí… yo te busco”
📖 “Vengan a mí todos los que están cansados y cargados, y yo los haré descansar.” (Mateo 11:28)
📖 “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.” (Lucas 19:10)
Hay alguien que te ve cuando nadie te mira
Que escucha tu llanto detrás de la risa
No tienes que fingir, no tienes que correr
Jesús te llama: ven, solo cree
Él dio su vida por amor a ti
Hay alguien que te ve… y murió por ti
📖 “Jehová te mira, Él ve tu aflicción y escucha tu clamor.” (Éxodo 3:7)
📖 “Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” (Romanos 5:8)
Él conoce el peso que llevas por dentro
Tus errores, tus dudas, tus miedos al viento
Pero no vino a juzgar, vino a salvar
A sanar tu herida, a enseñarte a amar
📖 “Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él.” (Juan 3:17)
📖 “Él sana a los quebrantados de corazón y venda sus heridas.” (Salmo 147:3)
En la soledad, estuve a tu lado
Cada lágrima, en mi mano ha quedado
No eres invisible, nunca lo fuiste…
Para mí siempre fuiste amado, fuiste escogido
📖 “Mis lágrimas tú has contado; ¿acaso no están en tu libro?” (Salmo 56:8)
📖 “No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú.” (Isaías 43:1)
Hay alguien que te ve cuando nadie te escucha
Que conoce tu historia, tu herida más profunda
No tienes que limpiar tu alma para venir
Solo abre el corazón… y déjame entrar en ti
Jesús te llama por tu nombre hoy
Hay alguien que te ve… ¡y ese soy Yo!
📖 “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él.” (Apocalipsis 3:20)
📖 “El buen pastor llama a sus ovejas por nombre y las saca.” (Juan 10:3)
Hay alguien que te ve cuando nadie te escucha
Que conoce tu historia, tu herida más profunda
No tienes que limpiar tu alma para venir
Solo abre el corazón… y déjame entrar en ti
Jesús te llama por tu nombre hoy
Hay alguien que te ve… ¡y ese soy Yo!
🌟 Presentación
“Hay Alguien Que Te Busca” nace de la convicción central del Evangelio: que Jesús no es un Dios lejano, sino el Buen Pastor que busca, ama y llama personalmente a cada ser humano.
La letra refleja el dolor cotidiano de quien se siente invisible, cansado o sin esperanza, pero también la voz amorosa de Cristo que declara:
“Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19:10).
Cada verso es un recordatorio de que no estamos solos: el Señor conoce las lágrimas que nadie más ve (Salmo 56:8), escucha el clamor escondido tras una sonrisa y llama a cada persona por su nombre (Isaías 43:1; Juan 10:3).
En el coro resuena el mensaje del amor sacrificial de Cristo:
“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8).
La canción no solo busca consolar, sino invitar a abrir el corazón y recibir al Salvador:
“He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él” (Apocalipsis 3:20).
“Hay Alguien Que Te Busca” es entonces un llamado personal, íntimo y eterno: el reconocimiento de que Jesús nos vio, nos amó y dio su vida por nosotros, aun cuando nos sentíamos olvidados.