El Evangelio de Cristo
Llevaba en mis manos la sangre del justo,
Respiraba amenazas, cegado de orgullo.
Pensaba servirte con celo y pasión,
Pero no conocía tu rostro, Señor.
(Ref: Hechos 9:1-2)
Una luz del cielo rasgó mi dolor,
Caí al suelo, temblando de temor.
“Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?”,
“¿Quién eres, Señor?” — “Yo soy Jesús…, a quien tú persigues.”
Y supe en ese instante: yo era el peor,
Perseguía tu amor… y tú eras mi Dios.
(Ref: Hechos 9:3-6)
La oscuridad cubrió mis ojos,
Pero tu gracia me dio la luz.
Fui lleno del Espíritu, nuevo en tu nombre,
Lavaste mi culpa, me diste una cruz.
De muerte a la vida, de siervo a heredero,
Me diste un llamado, me hiciste entero.
(Ref: Hechos 9:17-18; 2 Corintios 5:17; Romanos 8:17)
[Pre-Coro – Dueto Hombre y Mujer]
Pero me escogiste… ¡por amor!
No sólo me diste una vista mejor,
Me diste un corazón que vuelve a latir,
Una vida eterna que no supe pedir.
No viste un culpable,
Viste un hijo del Rey.
Ya no vivo yo… mas vive Cristo en mí.
(Ref: Gálatas 2:20; Efesios 1:4-5)
Me alzaste del polvo con manos de amor,
Borraste mi historia, quitaste el temor.
Tu gracia me halló y cambió mi existir,
Ya no vivo yo… mas vives tú en mí.
(Ref: Salmo 40:2-3; Gálatas 2:20)
Tu Espíritu me envió, sin temor al dolor,
De ciudad en ciudad, anuncié tu perdón.
En cadenas, azotes, jamás me rendí,
Mi orgullo murió… y tu gloria viví.
(Ref: Hechos 20:24; 2 Corintios 11:23-28)
Ahora con fuego y más convicción,
Ya no como Saulo… ¡sino como Pablo el enviado, Señor!
Tu voz me dio rumbo, tu cruz dirección,
Ahora soy tuyo, tuyo de corazón.
(Ref: Romanos 1:1; Filipenses 3:13-14)
Lo que hoy respiro… lo vivo en fe,
Tu gracia no fue en vano, me diste tu Espíritu.
Fui bautizado, nací de tu amor,
Hoy predico el mensaje que antes negué.
(Ref: 1 Corintios 15:10; Gálatas 1:23)
Sí, me levantaste del suelo al perdón,
Borraste mi culpa, me diste misión.
Tu gracia me halló… y aquí estoy por ti.
Ya no vivo yo… mas vive Cristo en mí.
(Ref: Efesios 2:8-10; Gálatas 2:20)
He peleado la buena batalla…,
he acabado la carrera…,
he guardado la fe...
(Ref: 2 Timoteo 4:7)
🌟 Presentación
"De Saulo a Pablo" es una canción inspirada directamente en el testimonio del apóstol Pablo, relatado en Hechos 9 y confirmado a lo largo de sus cartas. Es un canto que narra su transformación: de perseguidor de la Iglesia a apóstol de Jesucristo.
La letra recoge el momento de su encuentro con Cristo en el camino a Damasco, la voz del Señor llamándolo por nombre, su caída al suelo y la gloria de levantarse como un hombre nuevo. Con versos llenos de fuerza y un coro que proclama la gracia de Dios, esta alabanza recuerda que nadie está demasiado lejos para ser alcanzado por Su amor.
El puente y la reprise exaltan el llamado, el sufrimiento por Cristo y la misión que Pablo abrazó con fidelidad. Termina con una declaración inspirada en 2 Timoteo 4:7:
“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.”
Es más que una canción: es un testimonio cantado, una invitación a reconocer que todos podemos decir:
👉 “Ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí.”